Este año soñé, por primera vez, con Diego. Un amigo que murió hace un poco más de dos años. En el sueño, unos amigos iban a buscarme para decirme que él se había perdido, que estaban desesperados buscándolo. Comenzábamos a buscarlo, a pie, por zonas que tenían cada vez menos
Lo primero que escuchamos al asomar la vista en el conjunto es una advertencia: «No anda así (…) Si es que había sido su origen / una interrupción en la historia». Enfocamos la vista, la mantenemos; la vista se hace doble primero, luego se aguza y exploramos preguntándonos ¿qué es
No sé qué es un terremoto blanco, investigo. Llego a una página de la armada de Chile donde se describe lo ocurrido en el invierno de 1995: A comienzos de agosto, el invierno se tornó aún más severo en Chile Sur y Austral, decretando el Gobierno el 7 de agosto
Me llamo Romina Inocencia. Si los de apellido Gordo son generalmente flacos, los de apellido Delgado son rellenitos, si las Dolores del mundo son en realidad felices, las Inocencias podemos ser strippers… Romina Pistolas La excusa de ser stripper da para todo y los juicios sobre el trabajo sexual, también.
“(Toma su vela, el cepillo, etc., y repentinamente la inspira una esperanza, y deja las cosas en la mesa nuevamente)” Casa de muñecas reparada ¿Cómo la elección de diversos géneros de escritura nos dice algo sobre la travesía de una vida? ¿Qué forma de vida se va desplegando
lo que pasa con el alma es que no se ve lo que pasa con la mente es que no se ve lo que pasa con el espíritu es que no se ve ¿de dónde viene esta conspiración de invisibilidades? ninguna palabra es visible A. Pizarnik Jesús Presidente (pintada
la clara ignorancia que poseo sobre las cosas del mundo o una terca canción para una fanática de John Frusciante voy a prender fuego a mis libros de poesía saltar desde la nuca de alguna jirafa o escribir una canción por razones totalmente desconocidas y es que
Íbamos despacio. Había que deslizarse poco a poco y ordenadamente por el pasillo, como una hilera de vacas rumbo al matadero, pues el hecho era el mismo para todos: un viaje de ida. El ritmo, por lo lento y forzoso, terminaba por inundarme de una tremenda desazón. En un momento
“Cada palabra es como una innecesaria mancha en el silencio y en la nada”. S.B. I. “EL ASEDIO EN EL CUARTO”. Así llamó Becket a su intenso periodo de escritura iniciado en 1946, época en la que publicaría sus novelas Molloy y Malone muere, y la pieza teatral que se transformaría
La primera que me habló del Ángel Guardián fue mi mamá. No decía guardián sino de la guarda. Era una oración que me recitaba cuando era chica, muy chica. Mamá decía: ángel de la guarda, dulce compañía, no me dejes sola, ni de noche ni de día. No sé si










