Día 1
El primer auto en la mañana
la cama caliente después del desvelo
un amanecer fraccionado en recuerdos
la taza de té tibia a la espera del último sorbo.
El sueño de día para no tener que vivirlo.
Vivir un día sin un continuo
un día perdido.
Pensé que valía la pena escribir
pensé, sentí, la
taza de té
amaneció.
Día 9
Arremete la lengua
al alba.
Contra la piel
bate
despoja al pensamiento
se fuerza en sus huesos
¿Será la muerte?
Saliva en captura
trayectos y una pausa.
La boca
perdidos conductos, el aire
obliga al cuerpo vivo a no entregarse
¿Será?
Un organismo se fractura
símbolos como sentencias
el luto de la carne avergüenza al intelecto
¿Será la?
Muerte induciendo a la vida
miedo a no ser más que una de sus impresiones.
Palpitaciones divergentes
en la cama sin respuesta
saludan por la mañana.
¿Será la vida espiando sus sombras?
Día 17
Ella camina en la arena
arrastran sus sábanas
mitades sanguíneas
pies despojados del pasado.
¡Avanza Clara
te esperan en la orilla!
Recoge palitos
se encienden sus manos
cruje la puerta
el desayuno en la mesa
se oye el viento en la habitación contigua.
El primer fuego de la hoguera los enfrenta.
¡Tranquila Clara
te esperan en la orilla!
Bebe el café de la mañana
espacios de humedad la elevan
entre voces
saluda y responde
lo mira, no es él
la miran, es ella
son tres.
¡Sonríe Clara
hay ñoquis de almuerzo!
En la ducha
un monstruo de dos cabezas la acompaña
lo ama la aman los ama
paralelo el tacto
corre libre
marejadas se cuelan en la cocina
es hora de comer.
¡Espera Clara
te olvidan!
Triangular silente
voces en continuo
un soplo.
La fuerza del mar tiembla en la madera
cabezas que se vuelven una.
Desaparece el monstruo
persiste la huella del roce secreto
el cuerpo de Clara resiste.
Envuelta en conchitas
la toman se callan
y vuelve a empezar
el día.
Día 23
Dormir
exposición en palabras
refugio de sus latidos
suaves hilos que abrigan
desbordes de mujer
hojas ignorantes, cama
manto simplemente
expuesto en flujos
a la vida.
Día 27,32
Sollozos de luna
veintisiete coma treinta y dos días
es el tiempo que tarda en dar una vuelta a la tierra
la luna
es el tiempo que deja descansar
lo vivido.
Por Valeria Stuardo