Copycat
Una meditación
coral, canto
del pájaro
y su pichón que reverbera
en el cuerpo;
una obra
encadenada,
horizontal, entre
cielo
y tierra. El
impostor depura
la voz que flota, desarma
el flujo en gotas
de agua,
rocío similar
al largo coro
que nunca deja
de caer. No desafina
el pájaro
aunque recién
aprenda. Piel porosa
absorbe;
reproduce.
Quien copia sigue
a otra copia
y en el centro
ningún sabio.
No hay
un color igual
a otro.
Tiburón
a la manera de Denise Fernández
El tiburón ajeno busca comida cerca de la superficie. Dice que subir es desandar el mar. Vuelve al fondo, donde ni los dientes ni los ojos sirven, porque un cazador los lastimó. Bucea en círculos, oliendo; en grupo, pero solitario.
Yo pensé en un tiburón bioluminiscente. Uno que cuando esté triste parezca una luz de neón. O uno que escupa fuego como un dragón, y acompañe al que se queda ciego. Que haga del fondo un espectáculo. “Pero eso cegaría a la mayoría”, me reclama.
Una ciudad espejo
a la manera de Claudia Masin
este río me recuerda a otro río
El amigo americano, Wim Wenders
Vos sabías que en los últimos momentos donde la vida
de a poco se extingue, como la luz por una puerta que se entorna
para que el hijo no escuche la discusión que hace rato empezó,
lo que funciona es el desvío. Jugar en el suelo y hacer de cuenta
que la voz de unos guerreros miniatura es más fuerte
que la de los gritos en la habitación. Vos confiaste en tu instinto,
el que te ayudó a sobrevivir: ese desvío que ahora te hace salir de la ruta
para llevar el auto hasta el mar, donde podés ver la arena ceder
ante ese azul más real que el de un falsificador profesional,
y más calmo que las luces fluorescentes de una ciudad vidriada.
Contra el diseño
a la manera de “58 indicios sobre el cuerpo” de Jean-Luc Nancy
Marioneta tironeada
por hilos antiguos; muñeco vudú
desparramado entre la gente;
aire y agujeros, materia
desobediente; nudo atado
a la tierra; ausencia
de campo; intruso en los deseos,
las ideas, el futuro; obstáculo
que posee y rechaza; colección
de pedazos, articulaciones
que se traban;
pero también
línea que une con otros iguales
y distintos; única piel que es también
sexo, porque todas sus partes
sienten y dan; territorio conocido
deforme, en contra del diseño;
capaz de lo posible
y a veces más.
Trama
a la manera de Kaveh Akbar
Cuántas veces repetir.
Las mismas imágenes. Se gastan.
De preguntar para entender.
Mi nombre. No sabe ser. Lo que quiero
de vos. Es amor y muta. Hay que escribir
lo mismo. Para que continúe.
Tramando esta lengua. Que trepa
y hace trampa. Rema
a contracorriente. Muda.
Una película. Se quema. Un cine vacío.
No ilumina. El agua que corre. En un país
sin pasado. Nadie vive.
Sin sonido. Se rompe una rama.
En el mar. Se pierde.
La historia
callada. La podemos hacer.
Aparecer.
Escuchar
a la manera de “Pitanga” de Logan February
Entonces de esto se trata,
de hacer brillar lo inútil,
es decir, devolverle al silencio
su terquedad, es decir,
un cráter negro
en el que nos gusta caer, es decir,
reunirnos como solo sabemos hacerlo
quienes vivimos el destierro, es decir,
mirándonos a los ojos, como parientes
que se encuentran
y se reconocen, es decir, para cuidarnos,
es decir, con la generosidad
de lxs poetas, que intentan aprender
formas nuevas, más amables, es decir,
de esto
se trata escuchar.
Por Matías Mendez