“Buenas compañeras ¿No os habéis fijado, que cuando en la labor de nuestra costura, necesitaís cortar un hilo es muy fácil de hacerlo, pero cuando se trata de cortar dos o más hilos unidos o retorcidos, apelaís a las fuerzas o a las tijeras para cortarlos? Esther Valdés, 1907. El
Labores textiles I El bordado fue siempre un sacrificio: quedarse en silencio para hallar otros modos de escritura mientras nos destrozábamos los dedos en el ir y venir de puntos nada más ornamentales consiguiendo formas ininteligibles y repetidas en las que pedía ubicaras mi corazón. II Dijo