Cuando éramos niños despertábamos con ganas de empezar el mundo. Sentíamos aquella fuerza posiblemente indescriptible en nuestro cuerpo, capaz de sacar sonrisas por la calle con un solo cruce de miradas. La vida entonces era distinta, aunque en realidad, al menos físicamente, la única diferencia radicaba en que éramos criaturas
Cuando trabajaba en el cine hubo un domingo en el que arrendaron la sala para un evento, era una conferencia sobre las incipientes barberías que hoy se pueden encontrar en la mayoría de los barrios de moda de Santiago. El evento duraba todo el día y no se exhibirían películas.
Al escoger un tópico como este para un breve apunte, busco comenzar a dar por superada la aberrante idea de que poseemos un completo control sobre nuestra literatura. Hacemos lo que podemos, mediante distintos esfuerzos, para conseguir un equilibrio que quizás no es tal dentro de nuestras frases (las cuales,