«Célula quiere decir hueco: como una hoja para ser escrita», nos dice la escritora mexicana Maricela Guerrero al inicio de este desafiante poemario. Sabemos que aquello que nos une con mamíferos, peces e insectos puede multiplicarse infinitamente, y guarda la potencialidad de lo que aún no ha sido puesto en
A veces un libro de poesía es también una imagen. Al leer Al río fui por una aguja de Mia Maurer, imagino la dificultad de enhebrar un trozo de hilo azul en un pequeño orificio. El ojo se coordina preciso con el índice y el pulgar para ajustarse a un